INTRODUCCIÓN
Continuamos con nuestra entrevista al actor Javier Almeda. En esta segunda entrega nos centramos en el motivo por el que visitó nuestra isla, el rodaje del largometraje “La Guía del Silencio” del cineasta Cándido Pérez de Armas.
PRIMER CONTACTO CON CÁNDIDO PÉREZ DE ARMAS
Hace unos seis años, Cándido subió a Barcelona a realizar unos cursos de formación y especialización en dirección de cine y yo tuve la suerte de conocerlo a través de un amigo común, un actor, Antonio Román, maravillosa persona. A través de ese primer contacto fue cuando empecé a investigar sobre su trabajo y se creó una muy buena química. A partir de ahí llevamos todo este tiempo los dos con ganas el uno del otro, de poder trabajar juntos, pero no era factible porque yo estaba haciendo televisión, y porque no había la oportunidad. De hecho en esta ocasión ha sido básicamente porque tras finalizar mi participación en una serie de televisión, en “Pelotas”, y el inicio, o no, de una cuarta temporada de “Sin Tetas no Hay Paraíso”, para Telecinco, había un hueco, un hueco en el que yo tenía que estar en Venezuela rodando un biopic fantástico, ya que tuve la suerte de estar allí el año pasado trabajando mucho en teatro. Por cosas del destino ese proyecto se ha dilatado en el tiempo y se ha retrasado, por lo que teníamos un espacio de tiempo ahí en el cual nos contactamos y nos dijimos, “ahora o nunca”. Nos quitamos cualquier tipo de prejuicio y nos hemos lanzado a realizar “La Guía del Silencio”, que es una muy buena historia, un muy buen guión escrita por él mismo.
Ahora falta muy poquito para finalizar el rodaje, que ha sido muy intenso, un trabajo duro pero del cual estamos muy satisfechos. De lo poquito que yo he podido visionar (porque estas cosas hasta que no están editadas y montadas yo no soy muy partidario de verlas), el resultado me parece muy prometedor.
“LA GUÍA DEL SILENCIO”
“La Guía del Silencio” es una película, primero original. A mí, la primera cosa que me llamó la atención fue lo original que era. Segundo me apetecía trabajar en Canarias. En este caso, del reparto artístico yo soy el único de fuera (y técnicos hay muy poquita gente), por lo que es un producto puramente canario, hecho por canarios, hablado en canario, con esa dicción, esa melodía preciosa que tenéis, y que lleva el sello canario. Entonces el ser el adoptado (llevo aquí un mes y quiero quedarme aquí, porque esto es un paraíso), el sentirme integrante de esa familia, y poder vivir otra forma de ver el cine y además con una pasión fuera de lo normal, es algo maravilloso. La última cosa que hice en cine fue con Alejandro González Inárritu, “Biutiful”, y es una gran producción, es el star system (tuve la gran suerte de trabajar con Bardem, con Rubén Ochandiano, con Eduard Fernández, …, con los grandes), y todo el proceso es diferente. Entonces pasas de ese star system, donde hay todo tipo de medios y de producción, a esto, que era cuarenta locos dejándonos la piel y el alma por sacar una muy buena historia adelante. Y compensa mucho más de lo que parece. Compensa porque al final eres parte viva del proyecto.
A mí lo de protagonista no es una palabra que me entusiasme en este caso, porque además genera una presión añadida, pero yo creo que el protagonista es la historia. Cándido ha escrito una historia muy original. Es una tragicomedia, en tanto que los diálogos son muy ácidos, muy de aquí, con expresiones muy propias de aquí, y que te hacen sonreír y que enternecen al espectador.
Tenemos la gran suerte de trabajar con Isidro Quintana, de Ilion Studios, que en este caso estaba en “Planet 51”, con lo cual es un chaval de aquí que es un referente en cuanto a efectos especiales y efectos digitales. Contamos también con la colaboración de la Escuela de Imagen y Sonido de “La Guancha”. Muchos actores vienen de la Escuela de Actores, o compañías de teatro amateur y profesional de aquí. El sentirse integrado con un proyecto de estas características, con una filosofía muy propia, un corazón muy armado, una estructura muy compacta, es especial. Yo vengo del mundo del Circo, y eso de que el Circo es una gran familia me lo he encontrado en el rodaje de esta película. No es quizás lo habitual en una gran producción, en la cual tienes tu trabajo y formas parte de un engranaje perfecto, sino que aquí todos hemos estado muy cohesionados.
Tocamos la ciencia ficción porque la situación en la que se encuentras los personajes es una situación fuera de lo normal. Convivimos dos tipos de personajes en este caso, y la película reside básicamente en una sola localización: un colegio en La Esperanza, en El Rosario, el “Leoncio Rodríguez”. Hemos convivido hasta considerar nuestra casa el colegio. Además, cohabitando con un centro que está en actividad, por lo que cuando los chavales salen nosotros entramos, y somos muy discretos para que esa gran maquinaria del cine no afecte a la vida escolar.
Podemos hacerla en 34 días de rodaje, que creo que será al final, y podremos hacerla con un bajo coste, o considerarla como producción independiente, pero será factible gracias a todo esto: al alma que ha puesto todo el equipo, a que 40 personas desarrollan el trabajo de 120-150, y el que sea una sola localización.
CINE EN CANARIAS
Había estado ya en Canarias en cuatro ocasiones, también por trabajo (teatro, circo, cosas así), pero a nivel cine ésta es mi primera visita, y además espero que larga y fructífera. Sí he descubierto algo que, cuando lo comento todos me miran extrañados, porque vosotros no sois conscientes. Hay una localización principal, que es el colegio, pero sí hemos hecho exteriores, cercanos además, siempre en el Municipio de La Esperanza. La luz que tenéis aquí a nivel de cine es una luz diferente del resto del mundo. Normalmente en la Península esperamos tres horas para tener el punto de luz idóneo para tirar una secuencia, una toma o un plano. Aquí no. Aquí desde las 9.15 – 9.30 de la mañana tenéis una luz espectacular que te acompaña durante todo el día, y que le da una magia diferente, un color diferente, un sabor y un matiz diferente a la interpretación, a los paisajes, o a la ambientación de cada secuencia. De ahí que muchas empresas quieran venir aquí, sobre todo para rodajes de publicidad. Yo creo que va por esa línea. Y luego sí creo que en un punto en concreto en el que hemos tenido mucha suerte es porque La Guía del Silencio se ha desarrollado en el mejor momento, en un punto sin retorno. Estamos hablando de “Los Abrazos Rotos”, “Una Hora Más en Canarias”, “La Isla Interior”, “Hierro”, “Furia de Titanes”. Ya es una carrera imparable, porque finalmente el mundo ha descubierto el plató natural que significa las Islas (y, en este caso, yo, personalmente, Tenerife). Pero yo creo que ya no hay una vuelta atrás.
Yo tuve la suerte de estar unos días con los chavales de la Escuela de Imagen y Sonido de “La Guancha”, y tienen unas instalaciones espectaculares, con un material técnico francamente excepcional y que no está en la Península, por ejemplo. He descubierto que, a nivel técnico, hay gente altamente cualificada aquí, que se están yendo fuera, o que están, a través de los cortos, intentando promocionarse para que alguien apoye su carrera, pero que no tienen nada que envidiar a nadie. Aquí hay una estructura y una materia prima brutal para hacer cosas de muchísima calidad, y eso yo lo he descubierto en un mes y cuatro días que llevo aquí. Y creo que de eso es consciente mucha gente de fuera.
FUTURO
Tengo que regresar. Regreso a la Península por una serie de compromisos, pero espero volver pronto. En un rodaje está la primera fase, preproducción, que es prepararlo todo; después está ésta del rodaje, que es intensa, dura, en la que todo es tensión; pero ahora empieza una tercera, que en este caso es la más importante, que es edición y postproducción, para iniciar el tema de distribución y promoción (el recorrido por medios de comunicación, el presentarla en festivales, el buscar un distribuidor que apueste por ella y el negociar con televisión la posible emisión). Esa parte de la industria del cine es tan importante e intensa como el propio rodaje en sí. La preproducción y la postproducción son dos conceptos que el público no aprecia o no ve o no le llega la información, pero que son dos factores decisivos en el éxito de una película. Más ahora en la que ya no se hacen 2000 películas al año y se proyectan 200, sino que se están haciendo 300 al año para proyectarse 60 – 70, con lo cual si quieres estar ahí esa labor es vital, es necesaria.
Yo ahora, finalizado el rodaje me quedaré una semana, para desprenderme del personaje y porque hay que hacer gestiones aquí a nivel de organismos oficiales, etc, pero creo que la estancia en la Península será breve porque volveré a bajar pronto. Hay algún proyecto, algún proyecto muy interesante, tanto en teatro como una cosa de cine. De las cuales nunca hablamos los actores porque somos muy supersticiosos y esperamos a firmarlas para poder hablar, pero sí estoy intentando una continuidad. Una vez cumplidos los compromisos que tengo en Barcelona (una cosa de una serie de televisión, a nivel nacional que debemos presentar, y con un par de cositas de cine, que son relativamente pequeñas y que nos son, en estos casos, protagonistas, sino papeles de reparto y un secundario de lujo), mi intención sí es pasar al menos parte de mis vacaciones estivales aquí, y a partir de Septiembre tener una continuidad.
AGRADECIMIENTOS
Adivina Quién Viene al Cine quiere agradecer a Javier Almeda el que nos haya concedido esta amena e ilustrativa entrevista, y a Aaron S. Ramos (fotógrafo oficial de “La Guía del Silencio”) por el material gráfico. Tampoco podemos olvidarnos en este apartado de agradecimientos de Ylka Tapia (directora de producción y jefa de prensa del largometraje) por el ofrecimiento y las facilidades, ni de Paco Almagro y su equipo de Creacción por la hospitalidad y los recursos.
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